top of page

¿Y mañana que?

palomas-amanecer-2-copia
«La permanencia, perseverancia y persistencia a pesar de todos los obstáculos, desalientos e imposibilidades: es eso lo que distingue las almas fuertes de las débiles.” (Thomas Carlyle)

Durante este proceso de cuarentena (Lockdown) mi musa no ha querido descansar, de cada experiencia vivida me surge una nueva idea de un tema para compartir. Posiblemente porque mi proceso de cuarentena me ha llevado a comenzar a trabajar a las 7:00am y en ocasiones darme cuenta de que son las 6:30pm y aún sigo conectando, constando algún correo que llego de repente. Yo no estoy de vacaciones, no estoy disfrutando de tiempo compensatorio, ni estoy sentado pensado que con que me voy a entretener mañana. En mi caso simplemente incremente los días regulares de “Home Office”, y elimine las visitas a la oficina temporeramente.

Hoy, luego de una breve conversación con una querida amiga y compañera de maestría,  al finalizar nuestra conversación, mi musa (que se llama Nina) me grito, ¿Y mañana qué?


Y aquí estoy frente a mi ordenador, haciendo una de las cosas que más me apasiona en la vida, plasmar lo que siento y compartirlo con otros. Quienes me siguen en las redes sociales son testigos de que procuro dentro de lo posible no ofender a nadie, nunca mencionar nombres, no utilizar estilos incorrectos al escribir, hacer buen uso del tino, tono y tacto, y de utilizar un lenguaje fresco y sencillo. Pero todo en la vida tiene un límite, y con toda honestidad ya estoy al límite con algunas publicaciones. La razón principal es porque veo muchos mensajes compartidos (Share), pero no veo acompañando al mensaje lo que yo llama un análisis crítico, no escucho la voz de quien lo comparte, no logro entender su posición con respecto al tema, en fin es un repetir como el papagayo.

Y yo me pregunto, ¿Cuál es la intensión personal con este mensaje? ¿Cómo puedo conocer cual está siendo su aportación social en este momento? ¿Cuál es el objetivo de vida de esta persona? Y me lo pregunto, porque son las mismas preguntas que me hago a diario en medio de este proceso histórico de mi vida. Me lo pregunto, porque me interesa sobre manera saber cuál es mi aportación a la sociedad, para que he sido llamado y si estoy o no cumpliendo con ese llamado.

Creo firmemente que quienes no hayan entendido a esta fecha la necesidad imperante de quedarse en la casa, es porque simplemente no tiene la capacidad para masticar chicle y caminar a la vez. Personalmente decidí que no tengo tiempo para continuar reforzando el llamado. Pero claro, quienes aún tengan tiempo y fuerzas continúe con su aportación social. Yo me quiero enfocar en animar a otros a pensar en el mañana. Yo soy de los que siempre ha preferido asumir la posición del que pasa la página y continúa con la historia. Nunca he sido fanático de los y las “drama Queen and King”. Yo soy alguien que se enfoca en que voy hacer con esto que tengo hoy, para mejorar mi vida mañana.

Cada adversidad, cada fracaso, cada angustia, lleva consigo la semilla de un beneficio igual o mayor.” (Napoleón Hill)

Hay una palabra que fue tan y tan utilizada en mi país después del huracán Maria, que parecería que se agotó en el lenguaje de los puertorriqueños. Hablo de la resiliencia, hoy la cambiaron por la frase “quédate en tu casa”. Y a veces pienso, ¿pero es que acaso nos vamos a quedar en la casa para siempre? Me pregunto, ¿y cómo vamos a enfrentar el mañana?  Porque no sé si par usted no habrá mañana, pero para mí sin duda habrá un mañana. Si al universo le place, tendré un mañana allá afuera, abrazado nuevamente por los brazos de nuestra Madre Naturaleza. Pero si no le place, pues igualmente tendré un mañana, solo que en otro lugar diferente.

La resiliencia la definimos como esa capacidad que tenemos todos los seres humanos, de sobrepasar una difícil experiencia. Pero hay que añadirle a esa definición, “la capacidad de sobrepasar y salir de ella totalmente fortalecido.”  Si alguien me preguntara hoy ¿Y mañana qué?, te aseguro que tengo mi respuesta lista. Mañana le daré gracias a la vida por una nueva oportunidad de vivir, contare todo lo que tengo y lo que me sobra. Mañana daré gracias por lo que hoy ya no tengo, porque el no tenerle solo me habla de la no dependencia. Solo se carece de buenos sentimientos, de buenas intenciones, de acciones nobles, de apoyo al prójimo. Todo eso es si es carecer, lo demás es simplemente que no lo tenemos, porque no lo necesitamos.

“No sabes lo fuerte que eres hasta que ser fuerte es la única opción que te queda.” (Bob Marley)

Sobrepasar un tiempo de crisis y salir fortalecido del mismo, tiene que es