top of page

CANCELADO

retraso-cancelacion-por-huelga

“Dar ejemplo no es la principal manera de influir sobre los demás; es la única manera.”  (Albert Einstein)

La vida se trata de experiencias que nos llevan a validar si aquello que tanto hemos predicado se ha hecho rema en nuestras vidas. Para quienes hemos tomado la decisión de emprender por medio de un proyecto de motivación, es absolutamente necesario atravesar por situaciones que nos permitan validar los postulados que estamos transmitiendo.

Personalmente no creo en apoyar productos o servicios en los cuales no tengo confianza o simplemente no creo en ellos. Para poder promocionar, recomendar, ofrecer y vender un producto o servicio primero necesitamos creer en él. Cuando tenemos fe (confianza) en ese producto, el proceso de presentarles a otros, los beneficios que este pudiera ofrecerle es totalmente fácil.

Y usted dirá; “ok por favor nos podrías decir de qué trata el Post de hoy”. Sencillo, fácil, claro, evidente, hoy mi Post trata de una maravillosa experiencia que estoy viviendo en estos momentos mientras escribo este Post. Y ya en breve, muy en breve les estaré contando de qué se trata todo esto.

Les comparto que esta semana teníamos en agenda un viaje de trabajo a la Republica Dominicana. Los propósitos para los cuales viajamos fueron cumplidos exitosamente, podría incluso compartirles que supero por mucho mis expectativas. Para quienes me conocen y saben cómo amo lo que hago, podrían decir; “si claro para él todas sus experiencias de trabajo superan las expectativas”, pero en verdad que fue así.

Ahora bien, a partir de mi llegada al aeropuerto ayer viernes 28 de junio de 2019, todo comenzó a tomar otro rumbo. Por alguna extraña razón no fui notificado por el universo que era día de examen de curso para mí. Y al final de esta maravillosa historia entenderán de qué les hablo. Debo comenzar por compartirles que justo cuando comencé hacer la fila para completar mi proceso de “check in” para abordar mi vuelo de regreso a mi casita, abro mi maletín y descubro una gran sorpresa; mi cartera se me había quedado en la caja fuerte de mi habitación de hotel. “What!!!

En ese momento comenzó mi examen sobre Inteligencia Emocional 101. Primera pregunta, ¿Cuál fue su reacción en ese momento y como describe esa emoción?

Les confieso que un temor inmenso se apodero de mí, sentía que no podía respirar, me sudaban las manos, mi corazón latía a mil, el calor en mis orejas era como el de dos motores de avión y mi mente intentaba entender aquel momento pero no podía. Todo esto ocurriendo en solo segundos, y de repente escuche esa maravillosa voz que me dijo; “la respuesta a este momento se llama autocontrol.” Y en ese momento simplemente levante mi cabeza, sonreí, tome mi teléfono, llame al hotel, informe la situación, me confirmaron que en efecto la caja de seguridad estaba cerrada, así que mi cartera tenía que estar allí.

“Cuando no podemos cambiar la situación a la que nos enfrentamos, el reto consiste en cambiarnos a nosotros.” – Victor Frankl