Compromisos, promesas o esperanzas…

Tomado de Ecology of Leadership
En mi post anterior, les mencioné que esta semana estaría compartiéndoles una maravillosa experiencia vivida camino al aeropuerto el Dorado en mi amada Bogotá. Así que como decía mi abuela; “lo prometido es deuda” , aquí les dejo algunos detalles de mi profunda conversación con mi amigo Don Rafael Mariño.
“A menos que se haga un compromiso, sólo hay promesas y esperanzas; pero no hay planes.” – Peter F. Drucker
Esta expresión del padre de la gerencia moderna (Peter Drucker) resume perfectamente mi post. Desde el primer momento que entre a su taxi y Don Rafael se presentó, tuve la sensación de que aquel viaje sería una experiencia especial.
El compromiso de Don Rafael se hizo sentir de inmediato a través de su caluroso saludo. Como hemos mencionando en reiteradas ocasiones, compromiso es entrega, es pasión, es estar dispuestos y disponibles para hacer lo que se tenga que hacer y por el tiempo que se tenga que hacer. En otras palabras, es dejar de lado las excusas, es tomar acción y mostrar el mayor nivel de excelencia en todo lo que hagamos.
Don Rafael estaba impecablemente vestido, lo que provoco que de forma curiosa le preguntara si la agencia para la que trabajaba le exigía aquel nivel de elegancia en su vestimenta. Pero para mi sorpresa su respuesta se convirtió en lo que sería mi lección sobre compromiso esa mañana.
“No Don José, mi vestimenta solo es parte de mi sentido de compromiso con mis clientes. Yo estoy enfocado en que las personas que transporto no solo tengan un viaje seguro y placentero, quiero que ellos vivan una experiencia de cliente especial. Quiero que cuando se bajen de mi taxi recuerden mi nombre, y que cuando piensen en su viaje recuerden esta experiencia”.
De mas esta mencionar que quede totalmente impresionado, y que mi respuesta simplemente fue; “gracias por cambiar mi definición de marca personal”, la suya sin duda alguna es mucho más abarcadora que la mía.”
Desde mi punto de vista, el desarrollar una marca personal va mucho más allá que cumplir con las expectativas. Para mí, la marca personal es provocar una experiencia única en cada una de las vidas que tocamos. Es lograr que cuando ellos recuerden ese momento, seamos lo primero que venga a su menta. Nuestra marca personal debe ser evidencia de un genuino compromiso, de pasión por lo que hacemos, de entrega incondicional y de amor, de amor, y de mucho más amor.
“Si no amas lo que haces, por favor no lo hagas más.”